Mas ¡ay Señora!, que yo me veo oprimido por mis vicios, y cargado con mis culpas y pecados, y no puedo levantarme sin los poderosos auxilios de la divina Humor, y sin el favor de vuestro maternal socorro. Madre del consuelo, que experimentaste un dolor tan resistente al encontrar a https://devocinadmirabledelos7dol11752.blog-a-story.com/6175884/la-mejor-parte-de-devoción-admirable-de-los-7-dolores-que-maría-santísima-sintió-en-la-vida-y-muerte-de-su-amadísimo-hijo